Skip to main content

El Puente Salud Mental Valladolid ha ampliado durante 2017 su red residencial con una vivienda más para atender a personas con problemas de salud mental. Una vivienda supervisada con capacidad para cinco personas y en la que además de un educador se cuenta con la intervención de un equipo transversal formado por un trabajador social, un psicólogo y un terapeuta ocupacional.


Con la décima vivienda, esta red residencial no ha dejado de crecer y de prestar apoyos individuales e integrales para el desarrollo de la vida diaria promoviendo y posibilitando la integración comunitaria de las personas con problemas de salud mental. Convivir en estas viviendas, explica Raquel García, coordinadora del Área de Atención Residencial, implica normalizar su vida, ofrecerles una red de apoyo e integrarles en la Comunidad.
Estas viviendas, añade García, “están destinadas a personas con problemas de salud mental en situación estable que tienen motivación hacia el recurso”. En la mayoría de los casos, las derivaciones se hacen a través de los Centro de Salud.
La equipación de la décima vivienda ha sido posible gracias a la Fundación Alimerka que dentro de su convocatoria de ayudas a proyectos y actividades de entidades no lucrativas, ha concedido una ayuda económica a la entidad de 6.500 euros. Con esta partida se ha equipado a la vivienda en relación al mobiliario, menaje, electrodomésticos, lámparas… Una ayuda económica que ha permitido dotar al inmueble de lo necesario para equipar las cinco habitaciones con las que cuenta.

Deja un Comentario