El Puente Salud Mental Valladolid, en concreto, llevará a cabo 8 talleres, en las localidades de Olmedo, Aldeamayor de San Martín, Fuensaldaña, Cigales e Iscar, con una participación aproximada de unas 200 personas entre menores y familias.
El proyecto cuenta con el apoyo de la Consejería de Sanidad a través de los fondos para las estrategias 2023 del Ministerio de Sanidad que fueron aprobados en el CISNS de fecha 23 de junio de 2023 como apoyo a la implantación del Plan de Acción de Salud Mental.
La Federación Salud Mental Castilla y León, a través de sus entidades miembro, acaba de poner en marcha un nuevo proyecto denominado Salud Mental en Positivo, a través del cual se impartirán más de 100 charlas y talleres en entornos comunitarios en el medio rural, dirigidas a población menor y sus familiares, especialmente padres, madres y personas cuidadoras.
Se trata de una iniciativa centrada en el desarrollo de charlas y talleres centrados en la promoción de la salud mental y la prevención de los trastornos asociados, que serán impartidos por los profesionales de nuestras 11 asociaciones y 21 delegaciones en el medio rural que integran la Federación.
El proyecto está financiado por la Gerencia Regional de Salud de la Consejería de Sanidad de Castilla y León, con cargo de los fondos para la estrategia 2023 del Ministerio de Sanidad que fueron aprobados en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS) a fecha de 23 de junio de 2023, como apoyo a la implantación del Plan de Acción de Salud Mental.
El Puente Salud Mental Valladolid, en concreto, llevará a cabo 8 talleres, en las localidades de Olmedo, Aldeamayor de San Martín, Fuensaldaña, Cigales e Iscar, con una participación aproximada de unas 200 personas entre menores y familias.
A través de estas acciones se pretende trabajar conceptos relacionados con la salud mental en general, con enfoque en positivo: la relación entre mente y cuerpo, la importancia del entorno y la salud mental colectiva, la identificación y validación de las emociones, la forma en qué podemos reaccionar ante las mismas, entre otras temáticas.
Trabajar la salud mental desde un enfoque positivo, a través del autocuidado de nosotros y nosotras mismas y la relación con las demás personas, es clave para fomentar una gestión satisfactoria ante diversos acontecimientos de nuestra vida. “En un mundo en el que las preocupaciones de salud mental están en constante aumento, la importancia de trabajar la gestión emocional es cada vez más evidente”, explica Cristina Martínez, psicóloga de la Federación.
La capacidad de reconocer y regular las emociones en la población infanto-juvenil, y de reconocerlas en los demás, permite prever reacciones y resolver conflictos de manera efectiva. Esta “habilidad” es esencial para afrontar situaciones complejas y estresantes en nuestra vida.
A través de las charlas se pondrá especial énfasis en aspectos clave sobre prevención del suicidio, relacionados con: mitos y realidades acerca de la conducta suicida, factores de protección, de riesgo, señales de alarma y factores precipitantes.
El proyecto pone el foco en los entornos rurales, con el objetivo de acercar este tipo de actuaciones a aquellos lugares y personas que tienen más dificultades para acceder a este tipo de charlas y talleres. “Tenemos una amplia trayectoria en este tipo de acciones y también una extensa red de centros, 11 asociaciones y 21 delegaciones rurales, que desarrollan múltiples programas y acciones en el medio rural de Castilla y León, lo que favorece poder desplegar el proyecto por toda la comunidad”, apunta Ángel Lozano, gerente de la Federación.
Los aspectos relacionados con la salud mental que afectan a niños y niñas y adolescentes están adquiriendo cada día mayor importancia, tanto desde el punto de vista de la gravedad de los trastornos como de su prevalencia.
La salud mental se puede promover y los trastornos mentales se pueden prevenir o por lo menos tratar precozmente para disminuir su repercusión en la vida de las personas. Ambas cosas precisan de condiciones adecuadas para ser llevadas a cabo, como es el conocimiento de la salud mental, de los factores que la protegen o que la ponen en riesgo, de la forma inicial como se presentan los trastornos mentales y de la manera más adecuada de abordarlos.